Sunday, May 30, 2010

El cohete en vuelo de deflación es Ahora

La deflación es lo contrario de la inflación. Cuando hay un retroceso en el nivel de precios de las cosas apuntan a la deflación. El verdadero alcance de los daños a la economía bien podría ser potencialmente mucho mayor en el caso de la deflación a la inflación.

Cuando se derrumba garantía, los bancos comienzan a tambalearse bajo la presión y por supuesto el valor de las viviendas caen desempeñar un papel importante, e inevitablemente opresión de crédito telares. Naturalmente, cualquier posi
Los bancos comenzarán acumulando dinero. Con el fin de atraer a los depósitos en efectivo más, otros podrían ofrecer de interés más atractivas. En el horizonte, surgirá la imagen de los vertederos sin fin de productos que necesitan los compradores. Esto obligará a los precios para ir cada vez más bajos.

Es poco probable que nadie querrá invertir en estas circunstancias, y la perspectiva de conseguir empleo se deteriorará.

Los sistemas financieros son sensibles a las tendencias generales o direcciones. Por lo tanto, cualquier insinuación leve de las condiciones cambiantes de los buenos tiempos para los malos tiempos pueden desencadenar la confianza para pasar de las buenas perspectivas para las perspectivas sombrías. El apetito préstamo, así como se reduce el apetito de préstamo, lo que significa que en última instancia, los precios de la caída de los bienes.

El cóctel de los deudores, acreedores, consumidores y productores atada con una tendencia negativa, supondrá el lanzamiento de una sirena de alerta. Una vez que los acreedores comienzan a preocuparse, es difícil de contener sus miedos. La oferta de dinero comienza a secarse y dinero en efectivo es el rey.

Cuando el suministro de mercancías sube más rápido que la oferta de dinero en efectivo, las condiciones favorables para comenzar a reunir la deflación. La capacidad de prestar o pedir prestado es un problema que rara vez tiene un final feliz a menos que una gran cantidad de esfuerzo se da a resolverlo. No hay para hacer una inoculación inmune a la enfermedad de la deflación, ya que el componente de la enfermedad no es necesariamente siempre el mismo por completo, aunque muy cerca. Pase lo que pase, se necesitará bastante tiempo para deshacerse de él.

Lo que hay que ser conscientes de que no es entrar en una situación que hace que la gente espera y no compra porque piensan que los precios bajarán. Esto hace que para una espiral aguda de reducir los precios sin un final a la vista. Como resultado, las fábricas no pueden hacer dinero y acaban teniendo problemas cada vez más, los despidos y, en consecuencia empezar a reunir el ritmo.

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